OPOSITAR: TODO ES EMPEZAR.

Pongámonos en situación: te has llevado trabajando un tiempo y, a consecuencia de la crisis, te has quedado sin trabajo y, debido a tu formación, no sabes qué camino coger. Entonces te enteras -por Internet u otros medios- de que se van a convocar oposiciones para muchas plazas y te dices: ‘a por ello’. Pero, ¡ay!, te das cuenta en ese preciso momento de que no has estudiado desde … (mejor no lo mencionamos). ¿Cómo me pongo con esta tarea tan ingente de prepararme unas oposiciones? No hay que alarmarse; hay que mentalizarse de que unas oposiciones y preparar las mismas conlleva un enorme sacrificio y constancia, o, dicho de otra manera, concebirlas como si de una jornada laboral se tratase (es decir, una jornada de 8 horas diarias). Sin embargo, existen una serie de consejos y trucos para poderlas afrontar con la máxima garantía: una perfecta organización de los contenidos, evitar las posibles distracciones a la hora de estudiar (sobre todo, el móvil), aprovechar los tutoriales y recursos que Internet nos proporciona, apoyarse en alguien o empezar siempre por lo más sencillo -como pasa siempre que se realiza cualquier examen- son las pautas que todo opositor aspirante a un puesto fijo de trabajo debe tener en cuenta. También hay que estar praparado psicológicamente: puedes suspender o, en el peor de los casos, aprobar y quedarte sin plaza. Y recordad: todo sacrificio tiene su recompensa; y en una oposición, más aún. #opositar #VuelvoAEmpollar

https://verne.elpais.com/verne/2017/07/16/articulo/1500215227_795241.html